Hortifruticultura

Alrededor del 40% de los vegetales y frutas frescas que se consumen en Uruguay se producen en Salto, porcentaje que en invierno llega a ser mayor porque se produce en contraestación con el sur. La zona de producción hortícola, el denominado cinturón hortícola que rodea a la ciudad de Salto, conforma un paisaje único en el país donde se suceden los invernáculos, los micro y macrotúneles y los cultivos a campo, generando miles de puestos de trabajo.
La historia de esta producción está vinculada a las corrientes migratorias que llegaron a Salto en los siglos XIX y XX. El trabajo de esos pioneros, que junto a las características de la tierra y el clima, con mucha luminosidad, brindaron las condiciones ideales para el desarrollo productivo.
Actualmente hay unos 400 establecimientos pequeños y medianos que se dedican a la producción hortifrutícola.
En el desarrollo de este sector de la producción también fue fundamental la incorporación de tecnología. Ya en el año 1912, el entonces Ministerio de Industria y Comercio crea la Estación Experimental de San Antonio, que una década más tarde pasaría a integrar la Facultad de Agronomía de la Universidad de la República y funciona hasta la fecha. Está situada a 21,5 km de la ciudad de Salto, sobre la ruta 31 y cuenta con 1019 hectáreas dedicadas a la ganadería, agricultura, lechería, horticultura y citricultura.
También el INIA tiene su Estación Experimental de Salto Grande que desarrolla investigación en citricultura, horticultura, fruticultura y producción familiar. Brinda información a la zona noroeste del país, abarcando los departamentos de Artigas, Salto, Paysandú, Río Negro y el sur del país.
La producción hortícola comprende tomate, morrón, frutilla, zapallito, cebolla, zapallo y boniato, entre otros.